El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, culpó el martes a los países ricos por el calentamiento global y dijo que deberían dejar de decirle a su país qué hacer con la selva amazónica.
Lula prometió liderar una campaña para obligarlos a reducir esa contaminación.
"Lo que necesitamos es una campaña diferente, no apenas de preservar la fauna y la flora. Es hacer que los países ricos disminuyan la emisión de gases", afirmó el presidente.
Según el mandatario, los países ricos ya habían destruido sus propias selvas y deberían ahora reducir las altas emisiones de gases de efecto invernadero.
Brasil alberga la mayor parte de la selva amazónica, llamada el pulmón del mundo, que también sería amenazada por el previsto aumento de la temperatura de la Tierra en este siglo.
Lula indicó que Brasil había reducido la deforestación en el Amazonas en más de 50% en los últimos tres años, algo que debería servir de lección para los países desarrollados.
Un informe del Panel sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas responsabilizó casi con certeza a la actividad humana por el incremento de la temperatura del planeta en los últimos 50 años, sobre todo por gases emitidos por las naciones desarrolladas.
"Los países ricos son muy expertos, aprueban protocolos, hacen grandes discusiones de que es necesario evitar la deforestación pero ellos ya deforestaron todo, no tienen más que deforestar", señaló Lula en un acto oficial en Río de Janeiro.
El presidente aludió al Protocolo de Kioto de reducción de la emisión de gases invernadero y a las preocupaciones por la quema y tala que están reduciendo la selva amazónica.
Lula señaló que los países desarrollados deberían optar por utilizar combustibles no fósiles, como el etanol y el biodiesel.
.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario