sábado, 3 de marzo de 2007

Lince, ¿hasta cuándo durará el engaño?



Este es un artículo publicado en www.portaldelmedioambiente.com por Purificación González de la Blanca, Ex–vocal del Patronato del P.N. de Doñana, y son unas graves, y razonadas, acusaciones sobre el trabajo de los responsables de Doñana.



Es lunes, 19 de febrero de 2007. TVE emite el informativo de las 21 horas. Lorenzo Milá dice que “en breves momentos hablaremos del lince”. Aparece un lince en una pequeña jaula-trampa, maullando desesperadamente y bufando a las personas que se encuentran alrededor. Va provisto de un enorme, coloreado y rígido collar que, es más que evidente que le impedirá la caza, no solo porque esta especie se ampara en su mimetismo para vivir y para cazar sino también porque tendrá serias dificultades para girar el cuello. Le han colocado un conejo vivo a su lado, pero está asustado.
Comienza a hablar Miguel Palomares, investigador de la E.B. de Doñana. (una de las personas que, junto con Delibes,  Lafitte y Beltrán, se  ha dedicado, en el P.N. de Doñana, a los denominados “planes de manejo del lince”, experimentos  que, a mi entender,  han contribuido decisivamente a empujar a esta especie al borde de  la extinción). Dice que el problema de los linces  es la falta de conejos y que por eso se extinguen. Entre él y el periodista nos informan de que “solo quedan 15 linces en Doñana”, a los que ahora capturan para colocarles un GPS y perseguirlos (Otro nuevo experimento). Y que están embarcados –ahora- en un plan de cría en cautividad. 

PERO HAY COSAS QUE NO NOS DICEN:

-No nos dicen que el problema de la falta de conejos es general, y que también existe en las fincas situadas fuera de los límites del P.N.de Doñana –en las que, además,  se practica la caza- y,  sin embargo en ellas el lince va en aumento.

-No nos dicen que los investigadores -que en ningún caso pueden ser confundidos con conservadores-, llevan 25 años  acosando a los linces con Planes de Manejo, y que las capturas que se hicieron con cepos acolchados, (defendidos a ultranza por D. Miguel Delibes)  dejaron mutilados al 60 % de los animales: luxaciones, roturas de tendones, amputaciones con  pérdidas de dedos, de manos, etc., existiendo constancia de que algunos de ellos murieron de hambre al quedar incapacitados para cazar.

Capturas, anestesias, colocación de radiotransmisores, tomas de muestras de sangre, persecución…. Por si no fuese suficiente,  han llenado el parque de flashes que se disparan al paso de los linces, que, asustados, huyen  fuera de su perímetro y son atropellados en las carreteras.

-Tampoco nos dicen que hay cartas internas del Director Conservador del Parque en las que se acusa a Miguel Delibes y a su equipo de matar, con sus manipulaciones, a Nuria, una de las pocas hembras de lince que tuvo un parto triple y sacó adelante a sus cachorros. Murieron los cuatro. Ni que el 75 % de los jóvenes linces que marcaron con radiotransmisores, y el 50 % de los adultos, pereció. Ni que un lince puede vivir trece años pero los de Doñana solo llegan a dos o tres años de vida. 
 
-Ni que los investigadores de Doñana tienen un lobby montado a costa del lince (también del Águila imperial, de la que trataremos en otro momento),  que se da por extinguido en este parque. Dinero, mucho dinero, curricula, publicaciones, viajes, ascensos…a costa del exterminio de una especie tan amenazada y tan emblemática como el lince.

Subvenciones que perciben de distintas fuentes: la Unión Europea (500 millones de pts., hace unos años, solo  para uno de sus proyectos-fondos LIFE- ), el Ministerio de M.A.,  la Consejería de M.A. (Junta de Andalucía), etc. Y también de empresas privadas, como Lubricantes Visco, y de laboratorios norteamericanos,   como Glaxco Wellcom. Aunque el secretismo sobre estos enormes presupuestos es absoluto.

Casi exterminados los linces en Doñana el Lobby se mantiene ahora con un “programa de cría en cautividad”, consistente en robar cachorros de lince de fincas privadas –a esto le llaman traslocación-, en las que sobrevivían sin aparentes problemas, para conseguir su reproducción en cautividad y, en caso de éxito, su suelta en Doñana.

Tanto los animales robados como los escasos alumbrados en estas condiciones están muriendo, incluso alguno de los cachorros quedó ciego de algún golpe que recibió durante la “traslocación”.  Pero la rueda sigue: Dinero para destruir, dinero para reintroducir.  La nueva partida presupuestaria asciende ahora a 26.000.000€.

No  nos dicen tampoco con qué finalidad van a realizar el programa del GPS. ¿Para saber por dónde campea el lince? ¿Pero no sabían ya esto tras 25 años de seguimientos con radiotransmisores color butano y  provistos de una antena de medio metro?   ¿No habían sido un éxito esos experimentos? ¿Qué quieren saber ahora?
¿Cómo se entiende que tras 25 años de experimentos con el lince y miles de millones de pts.  (ahora euros), se supone que en beneficio de los linces de Doñana, ya no queden linces aquí y tengan que buscarlos en fincas particulares en donde jamás recibieron ayuda alguna para su conservación?

¿Hasta cuando estos “investigadores” van a tener carta blanca para atentar sin escrúpulo alguno contra especies cuya conservación es un tema de interés general?

Por cierto, cuando comenzaron los experimentos se estimaba que la población de linces en Doñana  rondaba los 350 indivíduos…



.

No hay comentarios: